Después de haber celebrado la verbena de San Juan y haber resuelto las últimas dudas sobre las placas solares, esta semana Antoni quiere acabar de pasar el mal sueño de la ola de calor que ataca a Cataluña.
Esta semana se está haciendo muy pesada. Primero fue fiesta el lunes y ya no pude ir al trozo arar y no he tenido tiempo a pensar en ello y ya somos viernes al mediodía. Además, el miércoles comenzó una ola de calor brutal que nos está dejando a todos secos.
Tengo los perros que sólo hacen que dormir, no quieren salir a la calle en ningún momento y sólo quiero que no les ocurra nada. Tal y como recomienda la Generalitat no les puede faltar lugares frescos y agua y así tengo a mis dos peludos. Yo sólo puedo mirar el telediario y el Twitter siguiendo toda el trabajo que hacen los bomberos al lado de casa, en Ribera de Ebro.
Para recordar un poco a todos, el miércoles pasado se inició un incendio en Ribera de Ebro y ha ido a más, ya que nuestro querido país ha recibido el golpe de una ola de calor que hoy llega a su punto más alto. En Alcarràs hemos llegado a superar los 41 grados de calor y no lo podemos aguantar más.
Este incendio ya llega casi a Maials y La Granadella y si no os lo creéis, en mi casa, en Alcarràs el humo, el olor y las cenizas del incendio ya han pasado por aquí y os puedo decir una cosa, asusta mucho . Esperamos que los Bomberos de Cataluña y la ayuda de todos haga posible acabar con el incendio lo antes posible. También quiero dar las gracias a los agricultores de la zona del incendio prestando ayuda labrando campos y moviendo mar y tierra para crear cortafuegos y ayudar a la labor de los bomberos y agentes rurales.
A esta noticia le podemos sumar que en España ya sufrimos dos muertos por culpa de la ola de calor. Hablamos de un joven de 17 años con un golpe de calor y un hombre mayor de 93 años que por culpa el calor extremo se ha desmayado en la calle y no pudo sobrevivir.
Han recomendado que nadie are los campos, que vigilamos mucho la exposición al Sol y que nos hidratamos. Yo lo haré y soy el primero en decir que no pasa nada, pero jornadas como las de esta semana no pueden volver a pasar en casa.
Ayer con el grupo de amigos estábamos en el bar comentando el humo que llegaba al pueblo del incendio y quisimos llamar al Ayuntamiento de la Torre del Español y la conversación fue de esta manera:
Antoni Becquel- Buenas tardes, como el incendio? Todo el mundo está bien?
Ayuntamiento de la Torre- Buenas, si, dentro lo que podemos todo el mundo está protegido
Antoni Becquel- Mira, somos un grupo de 20 agricultores de Alcarràs y quisiéramos saber si podemos colaborar en tareas de extinción del incendio que tenéis aquí al lado, podemos hacer algo?
Ayuntamiento de la Torre- Ante todo, muchas gracias por ofreceros en ayudar pero los Bomberos de Cataluña piden a todos a no interferir en su trabajo y ellos pedirán la ayuda ciudadana en el momento que la necesiten, ahora bien, estad preparados, no sabemos cómo evolucionará.
Antoni Becquel- Pues así lo haremos, cualquier cosa que necesite, estamos preparados para ayudar!
Ayuntamiento de la Torre- Muchas gracias, hasta pronto.
Esperar siempre que los Bomberos pidan la ayuda ciudadana, nunca actuar por impulso, puede ser catastrófico
Ahora solo podemos esperar que los Bomberos hagan su brillante trabajo y entonces si, todo el país debe ayudar a la zona afectada a cobrar la vida que tenían, a recuperar el paisaje y hacer país. A mí que soy una roca me sale la lágrima cuando veo que la gente de Cataluña hace movilizaciones para ayudar al agricultor con la granja totalmente afectada por el fuego y le ofrecen animales para volver a la actividad. Creo que actos de estos hacen sentir orgullosos de vivir donde vivimos. Además, ha surgido la iniciativa rebrotar la Ribera de Ebro y creo que si entre todos ayudamos, será posible. Ahora bien, Juntos.
Tras conocer la semana de infarto que he sufrido deseo que vuestra sea mejor. Para acabar de sufrir esta ola de calor le insto a seguir los consejos de la Generalitat y que cuidad de todo el mundo que le rodea.
Además, os recomiendo leer la entrada de los compañeros de las placas solares en Lleida donde dicen algo que muchos no pensamos nunca, Normalizar las olas de calor no es el camino a seguir.