A la hora de diseñar una instalación fotovoltaica de autoconsumo es fundamental tener claro desde el primer momento si la instalación eléctrica donde se va a conectar es monofásica o trifásica. Las implicaciones principales a nivel de componentes son los inversores y los analizadores de red (meters), ya que existen tipologías diferenciadas para instalaciones monofásicas y trifásicas.
Nota: esta guía es de aplicación para instalaciones de hasta 15 kW, que correponden a consumidores eléctricos residenciales o pymes. Para instalaciones industriales de mayor potencia, aunque la norma general es que sean trifásicas, se debe realizar una comprobación directa a través de consulta con el titular del suministro o, en su defecto, una inspección del Cuadro de Protecciones.
¿Cómo puedo saber si una instalación eléctrica es monofásica o trifásica?
Lo más sencillo es acceder a la Caja General de Protecciones (CGP) de la instalación e inspeccionar las protecciones eléctricas, por ejemplo, el interruptor magnetotérmico (se le suele conocer como Interruptor de Control de Potencia o ICP).
- Si el ICP tiene dos polos, la instalación es monofásica.
- Si el ICP tiene tres o cuatro polos, la instalación es trifásica.
Aspecto de distintos ICP
¿Puedo saber si la instalación es trifásica o monofásica sin acceso físico a la instalación?
Sí, podemos extraer esta información de la factura de la luz. Para ello debemos fijarnos en el coste de alquiler del contador.
- Si el coste mensual de alquiler del contador es de alrededor de 0,81€, estamos ante una instalación monofásica.
- Si el coste mensual de alquiler del contador es de alrededor de 1,45€, estamos ante una instalación trifásica.
Nota: algunas facturas son bimensuales y en estas se reflejarán unos costes de alquiler de contador de aproximadamente 1,62€ para instalaciones monofásicas y 2,90€ para instalaciones trifásicas.
Ejemplo de factura con contador monofásico:
Ejemplo de factura con contador trifásico: